El aceite esencial de lavanda , Lavendula officinalis, perteneciente a la familia de la menta aromática, se ha utilizado durante miles de años. El primer uso registrado se remonta al antiguo Egipto, donde se empleaba en el proceso de momificación, y sus usos abarcaban desde medicinales hasta religiosos. Los romanos añadían lavanda al agua de sus baños y su nombre proviene del latín "lavare", que significa "lavar".
Extraído de las sumidades floridas de la planta, el aceite esencial de lavanda es probablemente el más versátil. Es un aceite suave, con múltiples usos y múltiples beneficios.
En la antigua Roma, Egipto y Grecia, las personas añadían hojas o aceite esencial de lavanda para aliviar resfriados, tos y congestión nasal. Se cree que el aceite esencial de lavanda ayuda a activar los receptores de moco y a disminuir la hinchazón, aliviando así la congestión. La lavanda se usaba a menudo para limpiar las salas de hospital antes de que existieran los antisépticos.
Tiene propiedades antiinflamatorias, antibacterianas, antivirales y antifúngicas. Dado que las bacterias y los hongos en la piel suelen causar inflamación, la lavanda en un aceite portador puede ayudar a aliviar y promover la curación de afecciones cutáneas irritadas.
Diluido con un aceite portador y de uso tópico, el aceite de lavanda ayuda a hidratar la piel agrietada y seca. Sus propiedades antisépticas y antifúngicas pueden ayudar a reducir la picazón y la inflamación causadas por picaduras de insectos, erupciones o irritaciones cutáneas. Gracias a sus propiedades antimicrobianas, la lavanda proporciona alivio para quemaduras y cortes leves y puede ayudar a la piel con tendencia al acné.
Dado que la planta contiene tantos compuestos químicos diferentes que benefician al organismo, a menudo se considera un remedio multiusos para promover la salud. Estos compuestos incluyen flavonoides y cumarina, ambos con propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. También contiene linalool, que ha demostrado reducir la ansiedad e incluso la presión arterial.
En el cuidado capilar, la lavanda ayuda a equilibrar el cabello y el cuero cabelludo graso o seco, calma el cuero cabelludo irritado y estimula los folículos pilosos para promover el crecimiento del cabello. La lavanda se combina a menudo con el romero en fórmulas para el cuidado capilar. Sus propiedades sinérgicas son excelentes para el cuidado capilar.
Propiedades de la aromaterapia : La propiedad más conocida del aceite esencial de lavanda es su efecto calmante. Se asocia con la sensación de bienestar, ayuda a mejorar el estado de ánimo y a aliviar la tensión gracias a su efecto calmante, tranquilizante y armonizador sobre los nervios. Puede ser útil para dolores de cabeza, migrañas, náuseas e insomnio. Su fragancia floral y amaderada es excelente para aliviar el estrés, la relajación general e incluso para aliviar el dolor leve. La lavanda puede desodorizar el aire viciado y promover una respiración relajada.
Gracias a sus propiedades calmantes y sedantes, el aroma de lavanda ayuda a crear una atmósfera serena y relajante que favorece un sueño reparador. Termine el día con un baño o ducha con aroma a lavanda. Muchos aromaterapeutas sugieren rociar lavanda sobre la ropa de cama o aplicar un poco de aceite esencial de lavanda (en un aceite portador) en las muñecas o las plantas de los pies para un sueño reparador.
Hay estudios que han demostrado que la lavanda puede:
- Calma el sistema nervioso y mejora el estado de ánimo, lo que puede ayudar con la ansiedad y la depresión.
- Promueve un sueño más reparador al mejorar los niveles de melatonina del cuerpo.
- Ayuda a reducir el dolor de cabeza, ya que reduce el dolor general y la inflamación.
- Aliviar el dolor menstrual mediante aromaterapia o aplicándolo en el abdomen.
Un estudio publicado en la Revista de Enfermería Clínica en 2017 investigó el efecto del aceite esencial de lavanda en la calidad del sueño y el nivel de ansiedad de pacientes en la UCI coronaria. El estudio concluyó que el aceite esencial de lavanda mejoraba la calidad del sueño y reducía el nivel de ansiedad.
Embarazo y niños: No proporcionamos información sobre la seguridad de los aceites esenciales durante el embarazo ni para su uso en niños debido a que la información disponible es muy ambigua y, a menudo, contradictoria. Si le interesa usar aceites esenciales durante el embarazo o con niños pequeños, investigue por su cuenta y consulte a su médico, matrona o profesional de la salud antes de usarlos.
Precauciones: Si está embarazada, amamantando, tomando medicamentos, padece alguna afección médica o tiene alguna inquietud médica relacionada con usted o su familia, consulte con un profesional de la salud calificado y autorizado antes de usarlo. Solo para uso externo . Mantener alejado de los ojos y las mucosas. Mantener fuera del alcance de los niños.