El aceite de semilla de girasol, Helianthus annuus , extraído mediante prensado de las semillas, es un producto ligero. Aceite no comedogénico que se absorbe fácilmente y se puede utilizar en todo tipo de piel, incluidas las secas, normales, grasas y con tendencia al acné.
El aceite de girasol puede parecer un aceite simple y aburrido que tenemos en el armario de la cocina, pero es uno de nuestros aceites favoritos para el cuidado de la piel debido a su composición.
Hay dos tipos de girasol disponibles en las tiendas: el regular (alto en ácido linoleico) y el alto oleico. El girasol alto oleico se elabora con semillas de girasol cultivadas para obtener un alto contenido de ácido oleico, que es más estable al cocinar y se conserva durante más tiempo. Si bien ambos son beneficiosos para la piel, el alto oleico es más denso y su textura y comportamiento se asemejan más al del aceite de oliva.
Nuestro aceite de girasol orgánico es rico en ácido linoleico. Si bien muchos aceites vegetales contienen ácido linoleico, el aceite de girasol contiene entre un 70 y un 80 %. El ácido linoleico es un ácido graso esencial que, según estudios, ayuda a mantener la barrera de hidratación natural de la piel y previene la sequedad. El ácido linoleico del aceite de girasol penetra fácilmente en la piel y ayuda a nutrirla y protegerla de las agresiones externas.
Nos gustan los beneficios para la piel del alto contenido de ácido graso omega-6 (linoleico) que, junto con la vitamina E, ayuda a disminuir la inflamación.
La Asociación Nacional del Eccema recomienda el aceite de girasol para aliviar el eccema. Los aceites ricos en ácido linoleico también se recomiendan para la piel con tendencia acneica.
El aceite de semilla de girasol, conocido por ser uno de los aceites vegetales más hidratantes , es ideal para todo tipo de piel. Posee propiedades emolientes que no solo ayudan a hidratar la piel, sino que también la ayudan a retener la humedad, lo cual es ideal para pieles delicadas, secas o maduras. Sus propiedades antiinflamatorias ayudan a calmar y curar la piel irritada, reducir el enrojecimiento y promover una piel más suave.
En el cuidado capilar , el aceite de girasol, rico en nutrientes, hidrata, nutre y protege para un cabello sano y sedoso. Aporta nutrientes al cuero cabelludo y al cabello para nutrirlo y fortalecerlo. La hidratación es clave para el crecimiento natural del cabello.
Las propiedades hidratantes del girasol promueven la salud del cuero cabelludo y del cabello, agregan cuerpo y brillo y son útiles para el cabello seco, las hebras dañadas, la caspa, el frizz o el adelgazamiento.
El aceite de girasol contiene cantidades beneficiosas de fosfolípidos que también ayudan a nutrir y fortalecer el cabello.
Nuestro aceite de girasol con certificación orgánica del USDA se obtiene mediante prensado por expulsión de las semillas de girasol. Para mejorar su claridad y estabilidad, se refina con coadyuvantes de procesamiento naturales, vapor y tierra de diatomeas, todo ello conforme a las directrices orgánicas del USDA. Dado que nuestro aceite de girasol es orgánico del USDA, no contiene OGM.