La manteca de oliva contiene las propiedades hidratantes y antioxidantes del aceite de oliva, junto con las propiedades hidratantes y nutritivas de la manteca más espesa, para una piel sana e hidratada. La manteca de oliva es un humectante rico y denso. A diferencia del aceite de oliva, su consistencia crea un emoliente rico con una sensación menos grasa, ideal para todo tipo de piel.
Nuestra Manteca de Oliva se obtiene del prensado en frío de las aceitunas para obtener aceite de oliva, rico en vitaminas y ácidos grasos nutritivos. El aceite de oliva se mezcla con aceite de soja hidrogenado sin OMG para crear una manteca suave y sedosa que se funde rápidamente e hidrata profundamente la piel.
Usamos manteca de oliva en nuestra exitosa crema facial y de ojos con escualano. Experimentamos con numerosos ingredientes y elegimos la manteca de oliva porque sus características son muy similares a las de la manteca de karité. Si bien los emolientes de la manteca de karité suelen ser demasiado densos para las personas con piel normal o grasa, la manteca de oliva se funde a la perfección en una crema facial ligera y deliciosa, ideal para todo tipo de piel.
Consumo de grasas trans frente a aplicación tópica: ¿cuál es la diferencia?
Clientes preocupados nos han preguntado sobre la seguridad de los aceites hidrogenados en el cuidado de la piel. Una pregunta frecuente es: "Evito consumir aceites hidrogenados debido a su contenido en grasas trans, pero ¿es seguro aplicarlos en la piel?".
La respuesta es sí, son seguros para usar tópicamente sobre la piel.
Si bien los efectos negativos del consumo de grasas trans son bien conocidos, al aplicarlas tópicamente la situación cambia drásticamente. La diferencia clave radica en cómo el cuerpo procesa las grasas.
Al ingerir grasas trans, estas pasan por el sistema digestivo. Las enzimas digestivas del cuerpo descomponen el aceite hidrogenado en componentes más pequeños llamados ácidos grasos trans. Estos ácidos grasos trans finalmente se liberan en el torrente sanguíneo, lo que contribuye al desarrollo de enfermedades cardíacas y otros problemas cardiovasculares.
En marcado contraste, al aplicarse tópicamente, los aceites hidrogenados no se descomponen en ácidos grasos trans , ya que la piel carece de las enzimas necesarias. Además, la función de barrera de la piel impide la penetración de moléculas grandes, como las grasas trans. Estas moléculas permanecen en la superficie de la piel, formando una capa protectora que ayuda a retener la humedad para hidratarla y suavizarla.
Dado que los aceites hidrogenados aplicados tópicamente permanecen externos, no se descomponen y no penetran la piel ni ingresan al torrente sanguíneo, no representan ningún riesgo de efectos adversos para la salud.